El icónico restaurante La Bomba Bar, situado en la esquina de Caupolicán y Arauco en Valdivia, invita a la comunidad a un encuentro ciudadano el próximo domingo 31 de agosto, con el fin de recordar y compartir las numerosas historias y anécdotas que han tenido lugar en este emblemático local. Este evento busca recolectar recuerdos a través de fotografías, cartas y relatos que sean parte de la historia colectiva que ha ido forjando a La Bomba Bar a lo largo de sus más de 35 años de funcionamiento, convirtiéndose en un lugar de referencia tanto para los valdivianos como para visitantes de todo Chile.
Financiado por el Fondo del Patrimonio Cultural 2024, el proyecto “La Bomba Bar – Patrimonio de Valdivia” tiene como objetivo primordial garantizar la conservación del edificio histórico, que data de 1903. María Emilia Villagra, responsable de la iniciativa, ha manifestado que la legalización del estatus de Inmueble de Conservación Histórica es esencial para proteger este patrimonio cultural. La Bomba Bar ha sobrevivido a desastres significativos, como el devastador incendio de 1909 y el megaterremoto de 1960, pero la falta de mantenimiento y el paso del tiempo han comenzado a poner en riesgo su existencia.
En la actualidad, La Bomba Bar se destaca por su acogedor ambiente, donde se puede disfrutar de la rica gastronomía criolla de la región, incluyendo deliciosas cazuelas y empanadas, así como variados tragos típicos como el borgoña. La dinámica del local ha permitido que, a lo largo de los años, se celebran numerosos eventos y encuentros comunitarios, lo que refleja su relevancia en la vida social de Valdivia. Este restaurante no solo se ha consolidado como un punto de encuentro, sino también como un espacio que atesora la memoria colectiva de quienes lo visitan.
El llamado a la comunidad es claro: todos aquellos que hayan tenido alguna experiencia en La Bomba Bar, ya sea a través de cantar, celebrar o simplemente compartir momentos con amigos y familiares, están invitados a participar en esta rememoración colectiva. La cita es el domingo 31 de agosto a las 15:00 horas en el propio restaurante, ubicado en Caupolicán 594. Aquellos que no puedan asistir, también tienen la opción de compartir sus historias a través de un formulario habilitado por el local.
La desaparición de edificios patrimoniales con alto valor cultural y arquitectónico ha sido un problema recurrente en la historia de Valdivia, y La Bomba Bar no debe convertirse en parte de esa estadística. La protección legal que se busca obtener es vital para asegurar la preservación de estos espacios que narran la historia de la ciudad y fomentan un sentido de pertenencia. Este es un llamado no solo a recordar, sino a actuar, para que La Bomba Bar siga siendo un testimonio del legado cultural de Valdivia por muchos años más.
