El diputado Daniel Manouchehri ha expresado su firme postura respecto al juez Antonio Ulloa, en un contexto donde la controversia ha alcanzado niveles significativos tras la decisión de la Corte Suprema de suspenderlo por dos meses y abrir un cuaderno de remoción. Esta situación ha emergido tras la revelación de intercambios de información reservada entre Ulloa y el abogado Luis Hermosilla, lo cual ha planteado serias interrogantes sobre la integridad del sistema judicial. Manouchehri hizo énfasis en que no se pueden permitir actuaciones que menoscaben la confianza pública en el Poder Judicial, instando a una respuesta decidida frente a lo que considera un intento de operación para preservar el puesto de Ulloa a expensas de la justicia.
En su plataforma social, Manouchehri no dudó en afirmar que la expulsión de Ulloa es una medida necesaria y urgente. Aseguró que «no puede haber medias tintas» ante la gravedad de los hechos expuestos, subrayando que una posible decisión de proteger al juez implicaría un «blindaje corporativo a la corrupción» dentro de la judicatura. La rotundidad de sus declaraciones resalta la creciente preocupación sobre cómo se manejan las influencias y los nombramientos dentro del sistema judicial, lo que podría comprometer la independencia y la imparcialidad de la justicia en el país.
Los antecedentes surgidos del caso Ulloa han exhibido un entramado de influencias que, según Manouchehri, favorecieron nombramientos durante el gobierno del expresidente Sebastián Piñera. En este contexto, el diputado apeló a los jueces honestos y comprometidos con la ley a tomar posición en este asunto y apoyar la remoción de Ulloa. Aseguró que la permanencia del magistrado en el sistema judicial sería insostenible, enfatizando que Chile no puede permitir más zonas de impunidad y subrayando que es responsabilidad de todos proteger la autonomía y la independencia del Poder Judicial.
La controversia ha generado una creciente división dentro de la Corte Suprema, donde se han evidenciado disensos sobre la forma en que deben ser gestionadas las prácticas de lobby para acceder a cargos judiciales. Según informes de CIPER Chile, las votaciones en el pleno han revelado un margen estrecho en las decisiones sobre la posible remoción de Ulloa, lo que añade incertidumbre sobre su futuro. Manouchehri ha reiterado su compromiso de enfrentar a la red de influencias involucradas, aceptando los riesgos que esto conlleva, dejando claro que no temen a las consecuencias que pudieran producirse por sus denuncias.
Finalmente, el diputado Manouchehri ha subrayado la necesidad de contar con un Poder Judicial que rinda cuentas exclusivamente a la ley y al pueblo, al contrario de depender de pactos que puedan comprometer su independencia. En sus declaraciones, apuntó que esta situación no es una confrontación personal, sino una vital lucha por la credibilidad de las instituciones democráticas. Por último, expresó su determinación de mantenerse del lado correcto de la historia, afirmando que «no cabe el silencio ni la tibieza» en la defensa de un sistema judicial limpio y transparente.








