La Multigremial Nacional, que representa a 224 micro, pequeñas y medianas empresas en Chile, ha expresado su preocupación ante la creciente amenaza que representan los malls de propiedad china para el comercio establecido en el país. Según señala la entidad, el ritmo de expansión de estos centros comerciales está alcanzando un alarmante 30%, lo cual pone en riesgo la estabilidad y viabilidad de las pequeñas y medianas empresas que operan formalmente y cumplen con todas las normativas legales vigentes. Juan Pablo Swett, líder de la organización, enfatiza la necesidad de prestar atención a este fenómeno que podría transformar radicalmente el paisaje comercial en Chile.
La Multigremial advierte que la proliferación de malls chinos se traduce en una competencia desleal, ya que muchos de estos comercios operan al margen de la ley. «Hemos sido testigos de hechos constitutivos de delito que benefician a estos negocios», afirman. Esto incluye irregularidades en la obtención de patentes, reuniones sin el adecuado registro de lobby, e incluso la ejecución de obras sin los permisos de edificación exigidos. Contrariamente, las PYMEs nacionales están sometidas a un riguroso proceso de permisos y regulaciones, lo que pone a las empresas locales en una situación de desventaja.
Además de las irregularidades administrativas, la Multigremial ha denunciado prácticas que afectan tanto a la libre competencia como a la competitividad de los negocios más pequeños. «Algunos de estos comercios no emiten boletas de venta, comercializan productos ilegales y tienen denuncias relacionadas con la explotación laboral», indican. La entidad considera que estas acciones representan un desafío grave que afecta no solo a las empresas locales, sino también a los derechos de los consumidores chilenos, quienes pueden estar adquiriendo productos que no cumplen con las normativas legales.
Ante esta problemática, la Multigremial Nacional ha solicitado al Servicio de Impuestos Internos (SII) la implementación de un plan de fiscalización urgentes. Este plan debería abarcar el funcionamiento de los comercios de origen chino, asegurando que operen dentro de un marco de competencia leal y cumpliendo la ley tributaria. Asimismo, piden la intervención del Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) para garantizar que se respeten los derechos del consumidor y se cumpla con la legislación correspondiente.
Finalmente, la organización ha instado a los Ministerios de Obras Públicas (MOP) y Vivienda (Minvu) a requerir a los municipios detallada información sobre los permisos y patentes otorgados a estos comercios. También han hecho hincapié en la necesidad de que el Ministerio del Trabajo lleve a cabo una fiscalización ejemplar en las operaciones de estos negocios, asegurando que se sineguren las regulaciones laborales establecidas en Chile y los tratados internacionales que el país ha firmado. El llamado es a proteger a las empresas nacionales y a los consumidores chilenos frente a estas prácticas irregulares.








