El ministro del Interior, Álvaro Elizalde, ha presentado un preocupante balance sobre la situación de los incendios forestales en el sur de Chile, donde actualmente se están combatiendo 27 focos de incendio, 34 están controlados y uno ha sido extinguido. Las regiones de La Araucanía y Biobío están enfrentando una compleja emergencia que ha movilizado todos los recursos necesarios para combatir los siniestros y proteger a la población afectada. «La situación que se vive es bien compleja y estamos desplegando brigadas y medios materiales para hacer frente a esta crisis», comentó Elizalde durante su declaración.
En cuanto a las condiciones específicas en las regiones afectadas, el ministro informó que en la región del Biobío, particularmente en Santa Juana, se han habilitado albergues en la Escuela Chacay debido a la magnitud del incendio. Este evento ha conllevado a la suspensión de clases en tres colegios de la comuna, afectando la rutina educativa de los estudiantes. Asimismo, se reportaron incidentes en la región de La Araucanía, donde dos carabineros resultaron lesionados en un accidente relacionado con las tareas de evacuación y control del fuego.
Elizalde también se refirió a los daños materiales en el colegio Providencia, donde la cocina, el comedor y las bombas de agua sufrieron afectaciones, aunque afortunadamente no se reportaron heridos entre los alumnos. En un acto de prevención, se evacuaron a 25 niños de la institución educativa, y como parte de las medidas de seguridad, se ha decidido suspender las clases en colegios y jardines infantiles de toda la comuna, mientras que los albergues temporales han sido establecidos en el Liceo C9 para brindar refugio a quienes lo necesiten.
Ante este escenario, el ministro del Interior hizo un llamado a la población para que siga las instrucciones de las autoridades en situaciones de emergencia. «Queremos insistir en el llamado a las personas a hacer caso a las advertencias que realiza la autoridad, porque finalmente tenemos que velar por la salud y la seguridad de todas las chilenas y chilenos, así como de todos quienes habitan en la zona», expresó Elizalde, destacando la importancia de la colaboración ciudadana ante la adversidad.
La situación climática y los incendios forestales en el sur de Chile son una realidad de suma gravedad y requieren la atención y cooperación de todos. Las autoridades han dispuesto recursos significativos para enfrentar esta emergencia, pero el éxito en su combate dependerá también del cumplimiento de las recomendaciones y protocolos de seguridad por parte de la población. La gestión y prevención de desastres forestales son responsabilidades compartidas que buscan salvaguardar tanto la vida humana como el entorno natural.








